miércoles, 8 de diciembre de 2010
Un mundo desconocido para mi
Koboko, sexta-feira 10 de Setembro de 2010
Lc 6, 39-42
Sinceramente no recordaba que tenía la Misa del mes de Emelina la esposa del sr. Domingos. Así que según me avisaron salí corriendo para la capilla. Era un pequeñito grupo de personas, pero aún así hicimos memoria de Emelina.
Al terminar la misa llegaron los avisos. Dona Fátima dijo que teníamos que visitar a una señora de la comunidad porque ayer detuvieron a su marido en Moamba. Dijo que fue a ver a dos jóvenes presos, y que en ese momento lo detuvieron también a él. Me extrañó tanto el asunto que pregunté qué pasaba aquí. Todos se rieron y me dijeron que me lo explicarían los hombres al terminar la misa.
Así fue. Son cazadores de rinocerontes y se dedican a entrar en el Kruger o en el Sábiè Park para matar rinocerontes de forma ilegal y luego vender el cuerno. Han hecho fortuna, y tienen buenas casas, coches todoterrenos, etc… Todo un mundo que yo desconocía totalmente, pero que parece que tiene un buen número de personas metidas en Korumane.
Inkomu! El estar con la gente hace que poco a poco vaya conociendo mejor esta realidad, incluso las realidades semi-ocultas o vergonzantes. “¿Cómo puedes decirle: Hermano, deja que te saque la mota en el ojo”, sin fijarte en la viga que llevas en el tuyo?” Parece horrible lo que hacen estos jóvenes, pero ¿mi hipocresía de rico-capitalista no será más ofensiva a tus ojos? Ayúdanos a ser autocríticos para poder luego orientar la vida de este pueblo, especialmente de estos jóvenes.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario