La puerta está siempre abierta

Songo, sábado aos 13 de abril de 2019

            Estamos pendientes de que el letrero de la parroquia quede bien, y hoy le tuve que llamar la atención al pintor y hacerlo rectificar porque la separación entre las letras no era proporcional. Se intentó justificar, pero las evidencias, en un cartel de casi 7 metros de largo por 1,50m de alto, le hicieron reconocer el error. Además, es muy inconstante, porque estos días aparece y desaparece como el Guadiana. Tengo la impresión de que debe tener deudas porque me pidió 7000Mt, sabiendo que el trabajo total son ocho mil y que ya le adelanté dos mil.

            Estuve visitando a casi todos los grupos de catequesis. Es imposible durante una hora, pasar 5 minutos con cada grupo. Hay grupos muy numerosos, de más de 30 niños, y también tenemos dos grupos de adultos que también están haciendo su proceso catequético de tres años para ser bautizados, sin contar el grupo de catequesis en cinyungwe.

            Al visitar cada grupo te das cuenta de la preparación de cada catequista. Los hay que no paran de repetir oraciones o frases hechas, y luego también están los que te proyectan power-point, así como los que sueltan verdaderas homilías o moralinas, aunque ante todos ellos me quito el sombrero, por su empeño y su fe.

            Tatenda! Por este ambiente parroquial que no para. La puerta está siempre abierta desde las 6h hasta las 21h, y el timbre no para de sonar. Hay un movimiento permanente de personas: unos que pasan vendiendo una cabra, otros que quieren un papel para escribir, otros que vienen a charlar, otros que necesitan una llave… y así un sinfín de situaciones que nos hacen estar en permanente movimiento de acogida. Danos siempre puertas abiertas y corazones sin puertas, para que todos, sea cual sea su preocupación o necesidad, encuentren en nosotros un pequeño cobijo.