domingo, 27 de diciembre de 2015

UNA LLAMADA UN REGALO

Vila de Sábiè, quinta-feira 24 de Dezembro de 2015

                Una llamada y un regalo. Así quiero dejar en mi corazón grabado el día de hoy. La Navidad a más de 40ºC es un reto para cualquier persona, pero la alegría desbordante, los cantos, las danzas de todos… nos hacen olvidarnos por un momento del calor.
                Sin embargo, hoy quiero dejar en mi “re-cuerdo” una llamada y un regalo. La llamada fue de Sansom. Era mediodía y estaba en la Misión, me dijo que estaba libre, que lo habían soltado hoy y que se encontraba en el cruce del Shoprite. Me dio una gran alegría, porque sentí su voz emocionada. Hoy es Navidad: cuando alguien se libera, y comienza un nuevo camino, es Navidad. Sansom ha pasado un año y medio en prisión, y a su hijo más pequeño lo conoció entre rejas. Sansom es un trasto, pero tiene un buen corazón. No tiene rumbo en su vida, pero es servicial. Ha sido de los jóvenes que han marcado mi presencia en Sábiè para lo bueno y para lo malo, pero no puedo dejar de alegrarme con su alegría. Me emocionó, sentí que fue el primer parto-salida de este día de Navidad.
                Durante la eucaristía de la Vila trajeron un ofertorio solemne de aúpa. Entre todo lo que trajeron había dos fiambreras con comida. Al final me dijeron que era para mi cena. En ese momento me di cuenta de que yo no había previsto ninguna cena especial para esta noche. Me emocionó, pero ¿por qué? Porque es la primera vez que mi cena de Navidad es la comida de los más pobres. Ellos han compartido su comida conmigo, ellos han hecho un gran esfuerzo para poder darme una cena: arroz, carne y chamuzas. Es decir, los pobres comparten lo mejor que tienen, lo de más valor, lo que más les cuesta, y así se sienten verdaderamente felices.

Ni bongile! Mientras cenaba, daba gracias a Dios por su llamada en la persona de Sansom y por su comida en la cena que me preparó Ana María. Dios sigue naciendo así de misterioso, así de silencioso, sin casi hacerse notar. De corazón te digo: aquí estoy para ser Navidad!!