
La visita al Director Distrital de Educación fue más o menos como la esperaba. El panorama es el siguiente: el Internado tiene una cuenta con 62.000Mt que quedaron del año pasado, y este año se presupuestaron 88.000Mt. Esos 62 mil no se pueden usar porque hay un problema con las firmas de la directora y la gerente desde hace un año. Por otro lado, los 88 mil sólo los depositarán en abril. Y también nos informa que la deuda con el suministrador de alimentos asciende a unos 220.000Mt y se niega a seguir trayendo la comida al Internado masculino.
Los jóvenes llegarán a
finales de enero, y no hay nada de comida para ellos, ni dinero para comprarla.
Solución: he tenido que hacerme cargo de pagar la comida de los 25 jóvenes
durante unos meses, hasta que vayamos solucionando las cuestiones económicas.
Realmente, ni siquiera sienten vergüenza de decirlo y reconocerlo públicamente.
Pero también aproveché para ofrecerme en el acompañamiento del Internado, pues
necesito tener viva una dimensión social en mi servicio pastoral a esta
parroquia y quizá en ese ámbito me mueva bien.

1 comentario:
El señor es nuestro pastor, y nada nos faltará
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